Y... ¿qué diablos es un influencer?, ¿para qué sirven?, ¿con que se comen?
Un influencer es un gili con el autoestima por el suelo y el ego por las nubes que busca aprobacion de los demas y prejuzgar todo cuanto lo rodea con aires de superioridad xq les sigue gente y cn ello las marcas le pagan una publicidad. Deberian grabarlos siendo despotas y manipuladores para q las mismas marcas los manden a la misma m....
#3 #3 alexlico dijo: Un influencer es un gili con el autoestima por el suelo y el ego por las nubes que busca aprobacion de los demas y prejuzgar todo cuanto lo rodea con aires de superioridad xq les sigue gente y cn ello las marcas le pagan una publicidad. Deberian grabarlos siendo despotas y manipuladores para q las mismas marcas los manden a la misma m....@alexlico "autoestima por el suelo y el ego por las nubes" es eso siquiera compatible? XD
Que los influencers me parecen una puta mierda eh pero me ha hecho gracia la frase :v
#5 #5 shigetora dijo: #3 @alexlico "autoestima por el suelo y el ego por las nubes" es eso siquiera compatible? XD
Que los influencers me parecen una puta mierda eh pero me ha hecho gracia la frase :v@shigetora Realmente te equivocas. El ego es lo que pensamos que piensan los demás sobre nosotros. El autoestima en cambio es lo que pensamos sobre nosotros mismos. Dicho de otra manera, el autoestima es cuánto nos queremos, y el ego es cuánto nos creemos que nos quieren los demás. Precisamente suele ser común el que tiene muy baja autoestima tener un ego por las nubes. En cambio, lo raro es encontrar personas con el autoestima alta y el ego también alto, porque una persona con el autoestima alto no depende del ego, porque se la suda lo que piensen los demás.
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28 ene 2019, 21:13
Esto me recuerda... Trabajé no hace mucho en un hotel de 5* Gran Lujo de bastante renombre en mi ciudad, venían celebridades (empresarios, futbolistas, actores, jeques...) y debíamos tener evidentemente un trato exquisito. Pero ojo, nos especificaban los jefes que con quien debíamos tener más cuidado y mejor trato era con los INFLUENCERS de los cojones. Teníamos que tratarlos como verdaderos reyes, casi besarles los pies, estar solo por ellos y concederles todos los caprichos (y son muy, muy caprichosos). Les preparábamos cocktails y cafés espectaculares, comidas que eran manjares, solo para hacerse cuatro estúpidas fotos, para después dejarlo en la mesa, tirarlo a la basura y largarse a la habitación con aires de superioridad. No hay mayor mierda que los influencers.