cuando frene se va a comer la barra pero bien
Pues ya veo que es un martirio para la espalda baja,
sin contar que la gente te considere un estorbo cuando el metro se llene,
ni la incomoda situacion de estar a la altura una entrepierna.
Este verano volviendo en un tren tan abarrotado de gente que no dejaban subir a más gente en él, un señor y una señora mayores abrieron dos sillas de playa -de esas muy bajas- y se sentaron tapando la puerta.
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24 nov 2016, 21:52
Y lo mejor es que no tiene que ceder el puesto a nadie